Un producto mínimo viable (MVP) es una parte importante del ciclo de vida del desarrollo de software. Pero mínimo no significa rudimentario. ¿Cómo sabes que el tuyo está listo?
¿Cuál fue el paso fundamental que dieron algunas de las empresas emergentes más importantes, incluidas Facebook, Airbnb, Dropbox, Twitter, Uber, Spotify y Foursquare, antes de lanzar sus sofisticadas aplicaciones al mundo? Introdujeron un producto de viabilidad mínima (MVP).
MVP fue una semilla que se convirtió en empresas multimillonarias para muchos de estos grandes nombres. Y aunque no hay garantía de que su startup siga su ejemplo, este importante paso puede sentar las bases para el éxito futuro.
Un MVP es un acercamiento inicial a su idea que, si bien no está completamente desarrollado, puede mostrarle a usted (y a sus partes interesadas y usuarios) si tiene algo que valga la pena entre manos. Pero, al ser una versión incompleta de su idea, es natural hacerse la pregunta: ¿cómo saber si su MVP está listo para lanzarse?
¿Qué es un MVP?
Un MVP es un producto que tiene los requisitos críticos y la menor cantidad de funciones necesarias para tener éxito. El modelo está diseñado para satisfacer las necesidades de los primeros usuarios. Las empresas dedican el mínimo esfuerzo necesario a validar el producto y demostrar que tiene potencial en un mercado más grande.
Muchos tipos de empresas en diferentes industrias utilizan MVP, pero a menudo desempeñan un papel particularmente importante en el desarrollo de software, especialmente en equipos que utilizan metodologías ágiles.
Tenga en cuenta que un MVP no es un prototipo que se utiliza exclusivamente para fines internos; un MVP, a su vez, está destinado a consumidores reales.
¿Por qué necesita uno?
El objetivo principal de un MVP es recopilar comentarios de usuarios reales que puede utilizar para informar y mejorar su producto. Básicamente, podrá descubrir si su idea tiene fundamento y recopilar información sobre cómo mejorarla aún más para satisfacer las necesidades de una audiencia más amplia. Al mismo tiempo, estás gastando el menor esfuerzo y financiación posible para crear un producto real.
También es una solución ideal si desea llevar su producto al mercado rápidamente. De esa manera, puedes ponerlo en manos de los usuarios y trabajar en mejoras una vez que esté disponible.
¿Está listo tu MVP? 6 preguntas que debes hacerte
1. ¿Esto cumple con mis objetivos comerciales?
El primer paso del desarrollo de productos normalmente describe los objetivos del proyecto y determina cómo se alinean con sus objetivos comerciales. Al considerar si su MVP está listo para su implementación, debe volver a estos objetivos iniciales y pensar si los aborda con éxito o no.
En última instancia, desea que su MVP cumpla su propósito de existir. Si bien puede iniciarlo para recopilar comentarios y perfeccionar su idea, aún lo necesita para abordar con éxito los objetivos comerciales generales que el producto en sí debe cumplir.
2. ¿Cumple con mis requisitos mínimos?
Con la palabra "mínimo" claramente en el nombre de este producto, debería ser obvio que es una versión simple de su idea. Esto significa que debe cumplir con todos sus requisitos absolutamente críticos (aquellos que están en la definición misma del producto en sí) y no contener ninguna de las comodidades que “es bueno tener”.
Una vez que haya demostrado que su idea tiene mérito y puede tener éxito en un mercado real, puede trabajar para incorporar características que no son críticas pero que pueden hacer que su producto sea aún mejor. De hecho, un MVP será útil para determinar qué características realmente permitirán que su producto prospere.
3. ¿Esto resuelve algún problema?
De la mano de los requisitos mínimos está el problema que resuelve tu producto. Cuando tuviste la idea, definiste el objetivo: el problema que planeabas resolver al crearla. Incluso si su MVP es una versión inicial del producto, aún así debe abordar este objetivo central y, en última instancia, resolver el problema hasta ahora no resuelto que enfrentan sus consumidores.
4. ¿Lo he probado internamente?
Solo porque no es un producto completamente desarrollado, sigue siendo un producto para consumo público. Como NO es un prototipo –para uso interno– el MVP debe ser evaluado minuciosamente por su equipo interno. Debe pasar por todos los canales apropiados, incluidas las pruebas de control de calidad (QA) para eliminar errores y defectos y garantizar que funcione correctamente.
Si es posible, también deberías probar tu MVP en audiencias internas que no estén estrechamente involucradas en el desarrollo de software. Por ejemplo, quizás sus equipos de marketing o finanzas podrían probarlo y ofrecer comentarios desde una perspectiva no técnica antes de ponerlo en manos de usuarios reales.
5. ¿He ganado una audiencia confiable?
Una audiencia en la que pueda confiar es clave para obtener lo que necesita al implementar su MVP . Es importante reunir usuarios y consumidores reales que le brinden comentarios honestos y significativos. Es una buena idea identificar a las personas que están genuinamente interesadas en su producto y que realmente podrían utilizarlo a través de vehículos de investigación de mercado como la publicidad dirigida.
Una vez que tenga una audiencia para brindar comentarios significativos, busque formas de solicitarlos. Por ejemplo, combine los problemas que desea resolver o el tipo de retroalimentación que busca con preguntas abiertas sobre ellos. Asegúrese de investigar cómo y por qué usarían el producto, así como cualquier mejora que puedan sugerir.
6. ¿Tengo una hoja de ruta para mejoras?
Antes de implementar su MVP y determinar exactamente qué debe hacer para refinar y mejorar su producto, cree un plan sobre cómo implementará realmente esos cambios. Deberías, por ejemplo, tener una metodología clara para determinar qué características sugeridas incorporarás, teniendo un sistema para establecer una jerarquía. También debes determinar por qué canales pasará el producto mejorado antes del próximo lanzamiento.
En otras palabras, no querrás tener comentarios útiles disponibles sin saber cómo actuar en consecuencia. Crear una hoja de ruta antes del lanzamiento le permitirá realizar ajustes importantes rápidamente.
Un MVP es un paso fundamental antes de lanzar su producto a una audiencia más amplia, un paso que le permitirá ayudar a que su producto sea lo mejor posible. Si respondió "sí" a todas estas preguntas, entonces está claro: es hora de comunicar esto a su audiencia.