Pruebas funcionales versus pruebas de rendimiento: desmitifique las distinciones clave. ¡Aprenda qué es vital para la experiencia del usuario y qué garantiza una velocidad óptima de la aplicación!
Las pruebas son una de las partes más críticas de cualquier tipo de proyecto de desarrollo de software. Después de la planificación y la codificación, las pruebas garantizan que se cumplan todos los requisitos del proyecto y que cada característica funcione según lo diseñado.
Una de las primeras cosas que debe saber sobre las pruebas es que existen diferentes tipos que examinan diferentes aspectos del software. Las pruebas funcionales garantizan que cada característica funcione para los usuarios tal como fue diseñada, mientras que las pruebas de rendimiento miden las características del back-end para garantizar que el software funcione bien con el tiempo.
Aquí profundizamos más en lo que implica este tipo de pruebas.
#1 ¿Cuál es el propósito de las pruebas de software?
Las pruebas de software verifican todo tipo de aplicaciones y programas para identificar fallas que podrían causar problemas más adelante, como problemas de usabilidad, entrada y procesamiento de datos, así como cualquier otra cosa que pueda frustrar a los usuarios o, peor aún, comprometer sus datos.
Este tipo de complicaciones pueden ser catastróficas para las empresas que obtienen ingresos de la venta de software. Cuando una empresa pierde la confianza de sus clientes, también pierde ingresos y lealtad.
Estos problemas también pueden ser muy problemáticos para las empresas que utilizan aplicaciones personalizadas para sus empleados o para sus operaciones internas. Cuando una empresa pierde la confianza de sus empleados, pierde el compromiso con la misión de la empresa. Y cuando se pierden datos críticos, se pierde productividad, eficiencia y capacidad de responder bien a las necesidades de los clientes.
Puede resultar difícil recuperarse de cualquiera de estos fallos.
#2 ¿Qué son las pruebas funcionales?
Las pruebas funcionales garantizan que una aplicación de software cumpla con las especificaciones funcionales basadas en los requisitos del proyecto. Está dirigido por evaluadores que realizan cada función del software, incluidos los siguientes elementos:
- Iniciar sesión: observa el proceso de inicio de sesión para ver si los usuarios pueden iniciar sesión en la aplicación sin ningún problema.
- Funciones principales: garantiza que la aplicación haga lo que se supone que debe hacer.
- Interfaz de usuario: garantiza que las pantallas sean fáciles e intuitivas de navegar y que cada botón o enlace lleve al usuario a la ubicación esperada.
- Errores: determina qué condiciones deben ocurrir para producir un error y si aparecen los mensajes de error apropiados.
- Pago: examina la estabilidad del sistema de pago para garantizar que los usuarios puedan realizar pagos sin problemas.
Las pruebas funcionales se pueden realizar de forma manual o automática e incorporan varios tipos diferentes, que incluyen:
- Pruebas unitarias: garantiza que cada componente (o "unidad") de la aplicación funcione como se espera.
- Prueba de humo: Determina si cada función funciona como debería
- Prueba de cordura: verifica que los pequeños cambios solucionaron los problemas que se suponía que debían resolver
- Pruebas de regresión: asegúrese de que ciertas actualizaciones no causen problemas adicionales
- Prueba del sistema: una prueba de alto nivel que muestra si el sistema cumple con los requisitos técnicos, funcionales y comerciales.
- Pruebas de aceptación del usuario: normalmente se realizan al final de una serie de pruebas y garantizan que la aplicación pueda manejar escenarios del "mundo real".
#3 ¿Qué son las pruebas de rendimiento?
El propósito de las pruebas de desempeño es eliminar cualquier impedimento para un buen desempeño. Mientras que las pruebas funcionales analizan las capacidades de la aplicación, las pruebas de rendimiento verifican el software como sistema para garantizar que pueda manejar la cantidad esperada de tráfico, responder rápidamente a las solicitudes de los usuarios y operar a las velocidades adecuadas. El sistema se prueba en diversas condiciones para garantizar que pueda manejar diferentes escenarios.
Este tipo de prueba es tan importante como las pruebas funcionales porque puede tener un impacto igualmente grande en las empresas y sus clientes. Por ejemplo, una aplicación web que no se carga rápidamente es una que los clientes abandonarán rápidamente. Un programa de gestión de relaciones con el cliente (CRM) que falla cuando lo usa demasiada gente es algo que los empleados evitarán.
Las empresas que ofrecen servicios de pruebas de rendimiento ofrecen varios tipos específicos de pruebas:
- Prueba de carga: comprueba cuánta carga de tráfico puede manejar el sistema.
- Prueba de resistencia: examina la carga durante un período de tiempo para garantizar una estabilidad continua
- Prueba de volumen: determina la eficiencia de la aplicación cuando se carga con un gran volumen de datos.
- Pruebas de escalabilidad: garantiza que el software pueda manejar un número cada vez mayor de usuarios o datos.
- Prueba de esfuerzo: determina qué tan bien los recursos de hardware, como CPU, memoria y espacio en disco, pueden admitir el software.
#4 ¿Cuáles son las opciones de servicio para pruebas de software?
Así como puede optar por desarrollar software internamente, puede tener profesionales en su equipo que puedan realizar pruebas de software. Sin embargo, la clave para una prueba de software exitosa es que la realice un equipo diferente al que crea el software. Quitarlo una vez (es decir, dos equipos diferentes que trabajan para la misma empresa) está bien, pero eliminarlo dos veces (ambos equipos trabajan para dos empresas diferentes) es ideal.
Es por eso que, si desea contratar profesionales para realizar servicios de pruebas de rendimiento o servicios de pruebas funcionales, debería considerar la subcontratación de pruebas de software. Un equipo de pruebas subcontratado puede ofrecer muchos beneficios:
- Experiencia: Los evaluadores externos no hacen más que probar, por lo que son muy expertos en dónde se puede mejorar su software.
- Comprensión: como tercero, un evaluador subcontratado verá su proyecto desde una perspectiva puramente funcional y, por lo tanto, ofrecerá la retroalimentación más objetiva posible.
- Costo: Al contratar probadores de software como empleados, debe pagar por la búsqueda de talento, la incorporación, la capacitación y los beneficios además del salario, incluso cuando el trabajo disminuye. Con los servicios de pruebas de rendimiento y de pruebas funcionales subcontratados, usted solo paga por los servicios reales prestados y con la frecuencia necesaria.
- Comodidad: si está buscando un tipo específico de probador, una empresa de pruebas puede encontrarlo por usted, eliminando la necesidad de realizar una búsqueda exhaustiva.
- Seguridad: Los evaluadores externos siempre están actualizados con los últimos métodos y tecnologías, incluido el tema extremadamente importante de la seguridad.