El sector siderúrgico nacional ya espera cerrar el año con una caída del 20% en el consumo de acero a lo largo de 2020, debido a las consecuencias del nuevo coronavirus (Covid-19) en el país.
La proyección inicial del Instituto Aço Brasil daba un aumento del 5% con respecto a 2019, pero posiblemente se verá impactado por la paralización de las industrias de maquinarias y equipos, automotriz y de la construcción civil, que en conjunto representan el 80% de lo que se produce en el sector nacional. molinos
La información la dio a conocer el presidente del Instituto, Marco Polo de Mello Lopes, en conferencia de prensa digital, quien consideró que el panorama aún no es definitivo y podría cambiar una vez más, si se reanudan las actividades. Según él, la demanda del sector se desplomó en la última semana y, entre los efectos negativos de la pandemia en Brasil, puede haber una "crisis de proporciones inimaginables".
“Necesitamos avanzar hacia la recuperación económica de manera paulatina, con la seguridad necesaria, siguiendo los protocolos y procedimientos que aseguren la salud de las personas.
Pero este círculo virtuoso debe iniciarse lo antes posible, de lo contrario, podríamos tener un problema aún mayor”, argumentó.
Aço Brasil también estima que la demanda de la industria siderúrgica se reducirá a la mitad el próximo mes, en comparación con el actual, y que el resultado del segundo trimestre será al menos un 40% inferior al de los primeros tres meses de este año.
“Empezamos el año con buenas perspectivas, pero con un grado de utilización de las plantas en torno al 60%, cuando las empresas deberían estar operando por encima del 80% de su capacidad. Ahora, debido a esta caída de la demanda, este nivel podría caer aún más, si no se hace algo”, explicó.
Suspensión de actividades
Ante la situación, el funcionario afirmó que las empresas del sector ya están considerando cambiar o suspender sus operaciones y, eventualmente, incluso sofocar los altos hornos, incluidos los ubicados en Minas Gerais. Lopes recordó que las paradas en los procesos productivos del acero exigen una planificación a largo plazo y aumentan los costos.
“La reanudación de un alto horno, por ejemplo, puede demorar alrededor de seis meses”, recordó.
Para revertir la situación, además de la recuperación gradual del mercado nacional, las siderúrgicas también defienden el mantenimiento de la operación de puertos, carreteras y vías férreas en todo Brasil. Según él, las medidas de “bloqueo” adoptadas en varias ciudades del país podrían llevar al estrangulamiento del sector. “No llega la materia prima y tampoco fluye el producto final, todo por un apagón logístico”.
Para él, mientras no haya una reanudación del consumo en el mercado interno, las empresas necesitarán, aún más, enfocarse en las exportaciones, incluso frente a un escenario poco favorable también en el mercado internacional, dadas las demandas y los precios reprimidos.
El ejecutivo precisó que el Instituto, que forma parte de la llamada Coalición de la Industria, formada por varios sectores productivos nacionales, presentó al gobierno un conjunto de medidas para apoyar la recuperación de la economía y dijo que entre las solicitudes se encuentra una antigua. : el aumento de la tasa de Reintegra al 5%. Así, según Lopes, el sector podrá mejorar el precio de exportación en un 7%, ganando competitividad.
“El mercado internacional también es difícil, lleno de prácticas heterodoxas y reprimidas. Pero si nos dan la menor cantidad de condiciones, utilizaremos los canales posibles para vender y aumentar el uso de nuestra capacidad instalada. Porque la paralización de una planta resulta en desempleo”, advirtió.
ArcelorMittal
A través de una nota, ArcelorMittal Brasil confirmó que debido a los graves impactos provocados por la crisis relacionada con el coronavirus, realizará ajustes en su producción. En el segmento de aceros largos, la compañía reducirá temporalmente la producción en algunas unidades industriales el próximo mes.
Sin embargo, la empresa consideró que la unidad João Monlevade, la Mina Andrade y algunas unidades forestales ubicadas en el estado seguirán produciendo a ritmo normal.
En el segmento de aceros planos, la empresa decidió parar, en el plazo de 45 días, las actividades del alto horno 3 de la unidad de Tubarão, en Espírito Santo. “La atención al cliente continuará con normalidad, mediante stock y aprovisionamiento dentro de las necesidades y la demanda”, garantizó en el documento.
Fuente: Diário do Comércio - Mara Bianchetti