Companhia Siderúrgica do Pecém (CSP) mantendrá en operación su producción de acero, pero buscará nuevos mercados para generar producción en medio de la caída de la demanda de la aleación en Brasil y en el mundo debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
La empresa es la siderúrgica más nueva del país y el primer proyecto integrado de producción siderúrgica del Nordeste, ubicado en el complejo portuario de Pecém, en Ceará, entró en producción en 2016 y tiene capacidad para 3 millones de toneladas de planchones al año.
“La continuidad de la operación de la CSP es fundamental para la sociedad, porque mantiene la generación de energía eléctrica para el Sistema Interconectado Nacional (SIN) y oxígeno para hospitales y otros gases para industrias esenciales, como la de alimentos. De esta manera, la producción en CSP continuará”, dijo la siderúrgica en respuesta a consultas de Reuters.
La empresa citó un decreto emitido por el gobernador de Ceará, Camilo Santana, que autoriza a las empresas con altos hornos o empresas que operan en la Zona de Proceso de Exportación de Ceará (ZPE-CE), en Pecém, a continuar operando.
CSP afirmó que, hasta el momento, la operación de CSP este año ha seguido el plan de 2020. Sin informar una comparación con el mismo período del año pasado.
CSP es una empresa conjunta formada por Vale (VALE3) (participación del 50 %) y los surcoreanos Dongkuk (30 %), el mayor comprador mundial de planchones de acero, y Posco (20 %).
Sin embargo, a partir de este mes, CSP afirmó que “buscará nuevos mercados y clientes, para mantener las ventas en niveles suficientes para mantener la operación activa, preservando los puestos de trabajo”.
Varias siderúrgicas del país ya han hecho grandes anuncios de reducción de la producción en los últimos días, luego de que la demanda de acero en el país se desplomara. El viernes, Gerdau dijo que reducirá las actividades en las Américas, en recortes que incluyen el cierre del alto horno en la planta Ouro Branco (MG).
Además, Usiminas (USIM5) y ArcelorMittal Brasil también anunciaron ajustes similares al sofocamiento de hornos, una de las medidas más radicales que deben tomar las empresas del sector siderúrgico para enfrentar momentos de crisis.
Fuente: Reuters
