Operar una red eléctrica moderna es un desafío técnico. La red debe tener suficiente capacidad de generación para satisfacer la mayor demanda que se pueda esperar, y este valor aumenta cada año debido al crecimiento de la población. Sin embargo, la producción no es suficiente para garantizar un suministro energético estable: las empresas de servicios públicos deben mejorar constantemente su capacidad de transmisión y distribución, garantizando que la electricidad pueda llegar al punto de uso.
El verano es la época del año más desafiante para las empresas energéticas, ya que el consumo de electricidad aumenta considerablemente debido al aire acondicionado . La red debe estar preparada para suministrar electricidad a millones de sistemas de CA que funcionan en hogares y empresas, y es probable que la carga aumente cada año. La red también debe estar preparada para veranos con temperaturas superiores a la media, y se espera que 2022 esté entre los 10 años más calurosos registrados.
Reduzca sus facturas de energía y gas con una auditoría energética profesional y modernización de edificios.
Si bien las empresas de servicios públicos son responsables de modernizar y mantener sus redes, el sector de la construcción también puede contribuir a un suministro energético estable. Las medidas de eficiencia energética pueden reducir su consumo individualmente y el efecto combinado reduce la carga total en la red. Las medidas de respuesta a la demanda tienen el objetivo específico de reducir el consumo de energía en los edificios cuando la demanda de la red es alta y varios edificios pueden eliminar varios megavatios de carga.
La eficiencia energética y la respuesta a la demanda benefician tanto a los propietarios de edificios como a las empresas de energía. Con medidas de eficiencia energética, los edificios pueden lograr una reducción permanente en sus facturas de gas y electricidad. La respuesta a la demanda reduce el consumo máximo medido por los medidores de energía, lo que reduce los cargos por capacidad.
Medidas de eficiencia energética para el verano
El aire acondicionado es la carga eléctrica más grande durante el verano, pero esto también crea una oportunidad para tomar medidas para mejorar la eficiencia de la refrigeración. Hay tres formas principales de reducir el consumo eléctrico de los sistemas de aire acondicionado:
- Mejorar la envolvente del edificio para reducir la ganancia de calor desde el exterior.
- Actualice los sistemas de aire acondicionado con unidades más nuevas y eficientes.
- Reduzca aún más el consumo con controles automáticos: termostatos inteligentes, variadores de frecuencia, sistemas de automatización de edificios, etc.
Combinando estas medidas, un edificio puede reducir significativamente sus costes de aire acondicionado. Sin embargo, se recomienda encarecidamente una auditoría energética como punto de partida para identificar las medidas específicas que lograrán los mayores ahorros. La eficiencia energética requiere una solución personalizada para cada edificio, ya que las condiciones de la propiedad y los patrones de consumo de energía varían.
Las mejoras en la envolvente de los edificios van desde medidas simples como calafateo y calafateo hasta proyectos más complejos como reemplazos completos de ventanas y mejoras del aislamiento de las paredes. Cuando un edificio tiene un alto valor R y una envolvente hermética, se ahorra energía durante todo el año. Tanto los sistemas de aire acondicionado como los de calefacción funcionan de manera más eficiente, ya que se minimiza el intercambio de calor entre el interior y el exterior.
Los sistemas de aire acondicionado de alta eficiencia pueden generar grandes ahorros durante el verano. Generalmente, las opciones más eficientes para los propietarios de edificios son los sistemas de flujo de refrigerante variable (VRF) y los enfriadores modernos con compresores de velocidad variable. Cuando un edificio se divide en departamentos o espacios comerciales que requieren aires acondicionados unitarios, se puede ahorrar dinero utilizando sistemas mini-split con un alto valor SEER (Índice de Eficiencia Energética Estacional).
Los controles inteligentes pueden aumentar los ahorros logrados con un aire acondicionado eficiente. Los ajustes de temperatura se pueden ajustar para optimizar el consumo y la comodidad, y la velocidad de las bombas de agua enfriada y los ventiladores de la unidad de tratamiento de aire se puede reducir durante condiciones de carga parcial.
Se puede lograr una reducción significativa de la carga implementando estas medidas en varios edificios. Por ejemplo, si 20 edificios de oficinas logran reducir el consumo máximo de sus sistemas de aire acondicionado en 50 kilovatios cada uno, la demanda de la red se reducirá efectivamente en un megavatio (1.000 kW).
Beneficios de las medidas de respuesta a la demanda
Las medidas de respuesta a la demanda tienen un objetivo específico: reducir el consumo energético de los edificios cuando la red soporta cargas elevadas.
- Las empresas de energía suelen tener programas de respuesta a la demanda, en los que los propietarios de edificios reciben un incentivo financiero para reducir su consumo durante períodos de alta demanda.
- Incluso sin este incentivo, los edificios pueden utilizar medidas de respuesta a la demanda para reducir sus picos de consumo individuales, lo que se refleja en una menor carga de capacidad en la factura energética mensual.
Tenga en cuenta que a la mayoría de los consumidores comerciales e industriales no solo se les factura la energía (kWh utilizados), sino también la demanda máxima (kW máximos durante el período de facturación).
Existen muchos tipos de medidas de respuesta a la demanda que brindan a los propietarios de edificios la oportunidad de ser innovadores. Una forma sencilla de reducir los picos de consumo es cambiando el horario de funcionamiento de los equipos. Las cargas no críticas que normalmente operan durante los picos de demanda se pueden utilizar en otros momentos del día, y esto resultará en una reducción de los picos de demanda.
La respuesta a la demanda también se puede lograr con medidas más complejas. Por ejemplo, los propietarios de edificios pueden utilizar sistemas de baterías cargadas con energía solar en el lugar y utilizar su producción para reducir la demanda neta medida por el medidor de energía. Las grandes instalaciones con plantas de refrigeración también pueden implementar sistemas de almacenamiento de hielo, que se pueden utilizar para enfriar en momentos de máxima demanda mientras los enfriadores se ralentizan. Estos son sólo algunos ejemplos de cómo los edificios pueden reducir los picos de demanda.