El certificado de aceptación es el documento que el empleador/cliente emite al contratista certificando la finalización exitosa del proyecto. Es el certificado final que recibe el contratista como prueba de finalización del proyecto.
También pueden existir otras obligaciones para con el contratista incluso si se ha emitido el informe de aceptación. El contratista es responsable de corregir los defectos durante el período de responsabilidad por defectos. También pueden existir otros acuerdos de mantenimiento con el contratista que no tienen nada que ver con la aceptación por parte del cliente.
¿Qué es un certificado de adquisición?
Un Certificado de Adquisición (TOC) es un documento que certifica que el trabajo se ha completado en gran medida y que el área es segura para vivir. En otros contratos se denomina Aviso de Asunción o Certificado de Cumplimiento Práctico.
¿Cuándo se debe emitir el certificado?
Una vez finalizada la obra, el contratista informa al ingeniero sobre la aceptación de la obra. Así, el ingeniero responsable del proyecto notifica al cliente la finalización del proyecto y la necesidad de su aceptación.
Generalmente, la aceptación ocurre después de que se completan la inspección y las pruebas finales. El empleador suele participar en la inspección final y asumir el trabajo según lo previsto.
Durante la inspección, que se lleva a cabo con la participación del contratista, el ingeniero y el cliente, pueden revelarse algunos defectos. Estos serán comunicados al contratista y se le pedirá que los corrija antes de su aceptación.
Una vez informado al contratista que corregirá los defectos identificados en la inspección final, el ingeniero o el ingeniero y el cliente podrán verificar conjuntamente los defectos y aceptar el trabajo.
Luego, el contratista entrega el proyecto al cliente. Esto se hace aceptando nuestro certificado. El certificado de aceptación suele estar firmado por el contratista, el ingeniero y el cliente.
Por qué los contratistas necesitan un certificado de aceptación
La aceptación es la confirmación al contratista de que ha completado el trabajo de acuerdo con el acuerdo entre él y el cliente. Con la emisión de este certificado, el contratista queda relevado de su responsabilidad sobre el proyecto de construcción y el sitio de construcción.
Hasta que el cliente se haga cargo del proyecto, la responsabilidad sigue siendo del contratista. Además, la responsabilidad por cualquier pérdida o daño a la propiedad fuera del control del Contratista también recae en el Cliente.
Aunque se emite el certificado de aceptación, el contratista es responsable de solucionar los defectos que hayan surgido durante el período de responsabilidad por defectos. En la industria de la construcción, aproximadamente el 5% de los pagos de los contratistas se retienen como retención, que puede liberarse al final del período de responsabilidad por defectos.
Hay prácticas en las que el 100% o el 50% del dinero retenido se paga al contratista si éste ofrece una garantía aceptable. Esto podría hacerse de acuerdo con los términos del acuerdo contractual. También se deben completar las adquisiciones para este proceso.